Resumen de la Actividad: Las comidas (y bebidas) consumidas cada día por los estudiantes son la relación más inmediata que tienen con la energía. Está a nuestro alrededor, y está dentro de nosotros, y saber cuánta energía comemos es una parte pequeña del consumo total de energía. El consumo de alimentos para vivir es muy diferente del consumo de electricidad para el aire acondicionado, pero anima a los estudiantes a crear un mapa cognitivamente del consumo de energía a través de comida al consumo de energía en el entorno construido. Si comemos menos galletas, hay más galletas para comer más tarde Y ese es el concepto detrás de la conservación de la energía hoy.

Esta actividad no debe ser presentada de una forma que cause vergüenza de comida, vergüenza de tamaño o cualquier otra conversación en torno a las connotaciones negativas de los alimentos y las dietas. La sensibilidad a los alimentos, la escasez de alimentos y la inseguridad alimentaria son cuestiones importantes y apremiantes en la nación y pueden serlo en su comunidad. Use lo que sabe sobre sus alumnos y su propio criterio para determinar si las conversaciones sobre el consumo de alimentos y el consumo de energía son relevantes o apropiadas para su clase.

Parte 1: Haga un diario de comida

Pida que los estudiantes creen un diario de alimentos que registre todo lo que comen (y beben) desde el momento en que se levantan hasta que se acuestan. Para obtener una visión más holística, pídeles que repitan esto durante toda una semana. Al final del mini-proyecto, los estudiantes deben tener una lista de todos los alimentos y bebidas que consumieron organizados en sus días respectivos.

Parte 2: Calcular calorías

Ahora que los estudiantes tienen una lista completa de los alimentos y bebidas que consumen en un día (o una semana), pídales que calculen su consumo calórico diario. Además de mirar las etiquetas de los alimentos en las loncheras o en la cafetería de la escuela, puede hablar con el personal de su cafetería para obtener una lista de los datos nutricionales de los alimentos calientes que se sirven en la escuela durante las comidas. Además, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) publica una base de datos de búsqueda de nutrientes para referencia estándar. Usted o sus estudiantes pueden buscar en esta base de datos para consultar el contenido calórico de muchos alimentos diferentes.

Pida a los alumnos que hagan observaciones sobre sus cálculos. ¿Hay días en que consumen mucho más o mucho menos que otros? ¿Sus actividades físicas (deportes, ir a la alberca) se alinean con los días de consumo mayores? ¿Tienen un consumo de energía constante?